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miércoles, 2 de noviembre de 2011

¡Camarero, una de Bilis!

Como ya sabemos, las culturas son completamente diferentes en cada país, lo que para los de un extremo del  Ecuador es completamente normal para nosotros, por ejemplo, puede ser una aberración contra la ética y la moral humana, este es el caso que ha llegado hasta mis manos, el caso de una atrocidad, una cultura que no entiende de maltrato, que no entiende de sentimientos, en la que el dinero es más importante que la vida misma. Un país extremadamente pobre en el que cualquier cosa que suponga un benefício, por mínimo que sea, se intentará explotar al máximo independientemente de lo que sea, sin tener en cuenta las consecuencias que pueda llegar a tener.

Hace un tiempo, viendo un programa de televisión, quedé impactada por la denuncia que estaban realizando, no podía dar crédito ante la crueldad de tales imágenes.
En China se tiene la creencia de que la bilis del oso (sustancia que se encuentra en el hígado y que sirve para la mejor absorción de lípidos) mezclado con whisky es un potente afrodisíaco (nada nuevo teniendo en cuenta las excentricidades de este país) lo que realmente me impactó fue ver las condiciones en que se encontraban estos animales, hasta tres osos adultos encerrados en una misma jaula sin apenas espacio entre unos y otros, de sus patas colgando pesadas cadenas y trabas oxidadas; sus bocas completamente oprimidas por un bozal que apenas les dejaba entreabrirla unos milímetros, permanecían los días enteros sedados para que así, los que traficaban con ellos, (que no tienen ni la decencia de llamarse seres humanos ya que los seres humanos son seres racionales y y sentimentales y las almas de los que llevan a cabo estas actividades es carente  o mas bien NULA de todo esto) no tuvieran problema alguno de ser atacados, es decir, por precaución a que estos pobres animales tuvieran todavía algo de fuerzas para defenderse.
Este tipo de traficantes han proliferado, pues lo tienen tan fácil como capturar a las crías de los osos, matar a las madres, y meterlos en jaulas con el fin de extraerles la bilis, cuando al cabo de unas horas su cuerpo vuelve a reponer esta sustancia, la operación se vuelve a llevar a cabo .

¿Cómo lo hacen?
Sencilamente a través de una ecografía. Con esto se localiza el hígado,a continuación le pinchan con una aguja no esterilizada para sacarles la bilis, esta operación puede provocarle tanto al animal como al consumidor una infección letal, este acto se realiza hasta que el animal muere . Cuando el corazón del pobre animal deja de latir, no tiran su cuerpo, no, si no que lo llevan a restaurantes donde les pagan  por su carne y piel . 
¿Y el Estado, actúa ante esto? La respuesta en bien clara, en un país en el que el número de habitantes supera los 30 millones, el Estado actúa con total pasotismo ante todas estas situaciones, interesándose por lo que a él le pueda incumbir, por llenarse los bolsillos. Las estadísticas hablan por sí solas, China, una de las primeras potencias mundiales, y a la vez uno de los países con más habitantes pobres.
Por mucho que me indignen este tipo de situaciones poco se puede hacer ya que este tipo de problemas no sólo se ve en China , en nuestro propio país, en todo el mundo, se pueden ver situaciones de maltrato hacia los animales en el que el gobierno no actúa y para cambiarlo, habría que empezar por cambiar la política de gobierno instaurada en el siglo XXl que no es una aislada si no que es la evolución de todas las formas de gobierno anteriores.


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